Xinxin Jin

Luis Bello ocultó su identidad y trabajó como taxista. Durante un servicio, tuvo una noche inesperada con la presidenta del Grupo Fonseca, Sara Abel. Años después, Sara apareció con su hija Eva Abel y se casó con Luis, confiándole el cuidado de la niña. Sin embargo, los padres de Sara, ignorando el asma de Eva, la encerraron en una habitación, dejándola al borde de la muerte. En el último momento, Luis llegó y salvó a madre e hija.

Luis Bello ocultó su identidad y trabajó como taxista. Durante un servicio, tuvo una noche inesperada con la presidenta del Grupo Fonseca, Sara Abel. Años después, Sara apareció con su hija Eva Abel y se casó con Luis, confiándole el cuidado de la niña. Sin embargo, los padres de Sara, ignorando el asma de Eva, la encerraron en una habitación, dejándola al borde de la muerte. En el último momento, Luis llegó y salvó a madre e hija.

Alex Fonseca nació solo para ser un donante de sangre para su hermano, Sergio Fonseca, soportando años de maltrato bajo la manipulación de Sergio. Incluso la única persona que le mostró amabilidad, Flavia Castro, accede a comprometerse con él solo por temor a que él deje de donarle sangre a Sergio si se casa con otra persona. Al descubrir la verdad, Alex compra una isla y se aísla tras su renacimiento, cortando todo lazo tanto con su familia como con Flavia.

Tres días antes de su boda, Alan descubre que su prometida, Zenia Santos, está embarazada del bebé de su mejor amigo, Liam Iglesias. Esta traición destruye la confianza y los sentimientos que él tenía por ella. Finalmente, Alan se casa con Nina Salina, una adinerada directora ejecutiva que lo ha amado desde sus días escolares.

Durante quince años, Miguel Abrego ha amado en silencio a Elsa Pardo, dedicándose a ella e incluso sacrificando su pasión por el arte. Pero su mundo se desmorona cuando la ve enamorarse de otro. Desgarrado, Miguel se va al extranjero bajo un nuevo nombre, decidido a no mirar atrás. Nunca imagina que un día, Elsa cruzará océanos buscando al hombre que dejó escapar.

Alex Fonseca nació solo para ser un donante de sangre para su hermano, Sergio Fonseca, soportando años de maltrato bajo la manipulación de Sergio. Incluso la única persona que le mostró amabilidad, Flavia Castro, accede a comprometerse con él solo por temor a que él deje de donarle sangre a Sergio si se casa con otra persona. Al descubrir la verdad, Alex compra una isla y se aísla tras su renacimiento, cortando todo lazo tanto con su familia como con Flavia.

Maya Sierra, heredera de Isburgo, sacrifica su visión para salvar a Cody Ríos y se casa con él, solo para presenciar su infidelidad con su secretaria en el día que recupera la visión. Con el corazón roto, hereda el legado de su mentor y se divorcia de Cody. Pero mientras empieza a destacar en el campo médico con Valerio Castillo a su lado, Cody se arrepiente de todo y lucha desesperadamente por recuperarla.